lunes, 30 de abril de 2012

PRESENCIA EN UNO MISMO

Cuando conseguimos estar presentes aquí y ahora, en realidad lo que hacemos es estar presentes en nosotros mismos. Cuando no lo hacemos, estamos ausentes, ajenos a nosotros mismos. El otro día estaba con una amiga en la terraza de un café  y pasó por delante de nosotros un hombre que andaba cabizbajo. Se veía claramente que iba pensando en lo que fuera. Y yo le pregunté a mi amiga: ¿Tú crees que él está presente en sí mismo? Y me contestó: no, en absoluto. Efectivamente, no se daba cuenta ni de que estaba vivo. Como en ese caso, creo que la mayor parte del tiempo lo pasamos ajenos a nosotros mismos, es decir, sin vivir nuestra vida, ocupados solamente en hacer caso a los pensamientos que nos pasan por la cabeza, esclavos del hábito de darle vueltas a las cosas. Claro que podemos andar, mientras tanto, y respirar, por ejemplo, pero son funciones físicas que no requieren nuestra atención plena. Pues bien, ¿no resultaría gozoso disfrutar nuestra propia vida con suficiente conciencia de ello? Yo así lo creo. Es cuestión de proponérselo y de escoger un truco; el que mejor nos vaya a cada uno. A mi me suele funcionar darme cuenta de que piso sobre el suelo, que respiro aire, que el sol me calienta, que suena el reloj del campanario, que hay unos pájaros que pían, etc. El caso es darse cuenta de que estás vivo, estar presente en tu vida y sacarle todo el jugo que se pueda a cada instante en que tu mente no esté ocupada en la resolución de asuntos concretos de tipo profesional, familiar, etc. En el Zen se suele decir de los pensamientos que son "la incesante verborrea de la mente". Pues bien, se trata de no quedar atrapado por esa verborrea. Si lo hacemos, los resultados positivos se producirán muy pronto. Entre otras cosas, pondremos una barrera al estrés, pero también nuestra vida ganará en calidad y en matices.

2 comentarios:

Montse dijo...

Estic totalment d'acord amb el jesus amb tot el que diu sobre la ment (el nostre principal caball desbocat).
Jo mateixa estic practicant dia rera dia en el fet de viure cada present,cada minut per tal que no em perdi el present vivint en el passat o el futur. Em deia un amic fa dies: si estàs atrapat en aquests dos móns (passat o futur) és perquè un no està prou bé. Això em va fer pensar força!
Una pregunta que diuen que t'ajuda molt en moments en els que et quedes atrapat en el no-present és: "Quin és el problema que tinc ara?" JO m'ho aplico en moments determinats i sempre la resposta sol ser: "en aquest moment cap".
Per tant cal instal.lar-se en la presència, entrar en el nostre cos i sentir pau i quietud.

Chesús dijo...

Sentir pau i quietud. Quina manera més maca de referir-se al que som en realitat!